miércoles, 16 de enero de 2013

La Bola de Cristal, "En montón contra el PRI", 15 de Enero del 2013

La Bola de Cristal
En montón contra el PRI
Rogelio RIVERO

Ya no se valen improvisaciones, -ni improvisados-. Ni dar cuenta de un ventajismo que a ratos parecieran interpretaciones de canciones rancheras y quebraditas, bailadas a ritmo de banda, entre triquiñuelas y argucias opositoras.

Aun cuando la visión antagónica determine la continuidad aparente de la oposición en el Estado, el proceso intermedio del 7 de julio, por venir, pasará a la historia como el inicio de una transición con quienes se ejercerá el mandato conquistado en las urnas, y eso en sí mismo es un cambio en las formas, usos y costumbres en el reconocimiento, en la lealtad, en las afinidades, en la profundización de servir al pueblo, pero por sobre todo, en la manera de hacer y entender la política en esta era renovada.

Mucho han insistido los agoreros con ideología antagónica que tienen todo claro y saben lo que deben hacer en esta coyuntura aciaga para su sobrevivencia con la integración de los partidos de izquierda, -utilizando la derecha-, PRD, Movimiento Ciudadano y Acción Nacional, sin la participación directa del aquejado partido pegote, PT.

Y también van en busca del Panal, partido inspirador con el dedo propulsor de Elba Esther Gordillo, con o sin los maestros, o solo con los mentores como testigos. Y es que hay un indicativo que la Reforma Educativa, que la maestra no la tiene tan transparente ni decidida, ni con la aprobación de los legatarios que fueron avalados en el Congreso de la Unión y en el Senado, y, se aduce, no estarían todos comprometidos, así hayan jurado unión y lealtad a seguir con Peña Nieto como lo han pregonado.

En el camino del proceso electoral 2013 en Quintana Roo, surgirán más las ambiciones, simulaciones y confabulaciones entre partidos y copartiquinos. De ese jaez asaz, los actores más importantes del PRD en Cancún, quienes añoran seguir en la palestra política. En lo que sus adláteres, Julián Ricalde y Greg Sánchez, cada vez insinúan sus ansias de prefiguración y poder, alistan sus respectivas lanzas filosas para la batalla que habrán de librar con el objetivo de acomodarse en algún cargo en el proceso próximo.

O necesariamente a la vera de algún ungido impulsado por ellos, a la diestra y siniestra de quien les convenga o les dé más calor. Independientemente de la voluntad del convaleciente PAN. Otros aspiran. Sin duda terciar en la lucha electoral con intrigas, contubernios y celadas intestinas, en un proceso electoral que está latente por ocurrir.

El PRI arrojará claridad sobre lo que viene. Con la tendencia que se consolidará con la unidad priista para la eventual transición si las circunstancias lo requieren. Con la Sesión de la Asamblea Estatal de Delegados, en donde se designarán las candidaturas para el proceso electoral en ciernes que aportará con el alfaguara tricolor que tiene como aspirantes.

Analistas políticos aducen y deducen que repetirá Eduardo Espinosa Abuxapqui como presidente municipal en OPB. Asimismo –dicen- postularán al actual secretario de Hacienda estatal, Mauricio Góngora Escalante para alcalde de Solidaridad, a Freddy Marrufo Martín para el sillón municipal de Cozumel, y en eso anda también asomándose el diputado José Alfredo Contreras Méndez en Bacalar, junto con el también legislador Gabriel Carballo Tadeo, pero este en FCP, así también como Germán Parra López, quien aspira al sillón del palacio de JMM.

Hay más nombres, de diputados, regidores y otros actores, que ya se alistan a recibir la señal para saltar a la cancha electoral. Y así también centran sus anhelos para entrar al proceso que está por comenzar con la misma división imperante en el Estado entre partidarios y opositores existente en las filas del PRD, PAN y demás partidos chiquillos satélites.

No todos los que se dicen perredistas y panistas se plegarían a los tildes nacionales en turno pendientes a realizar otra vez la llamada megaalianza opositora para echarle montón al PRI, como es la aspiración del caudillismo del PRD en el Estado, de apellido R’amos, que han venido encarneciendo la titularidad estatal en una magnífica trinidad, Padre, hijos y yerno a la vez, los que apoyan a Julián, a donde se les asoma haciéndoles sombra, el mismito ministro religioso Greg, quien canta bien las rancheras y quebraditas a ritmo de banda. Y en eso anda.

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