La Bola de Cristal
PRD teje alianza con el PAN
Rogelio RIVERO
Desde los inicios del PRD han existido tribus en el partido del so azteca con ideología distinta. Al paso del tiempo, y en especial en las zonas donde el partido ha cobrado fuerza, las diferentes tribus se han enfrentado enconadamente por los cargos de elección popular. Las principales confrontaciones se atribuyen a la presencia en el partido de actores políticos que tejen redes corporativistas en las que se apoyan para alcanzar un cargo de elección popular.
Últimamente en el PRD se ha venido dando un debate recurrente al anunciar otra mega alianza opositora con la izquierda utilizando la derecha, junto con los coristas de los partidos chiquillos que siempre los acompañan, ahora con visos de otro armadijo opositor con la clásica ideología populista del perredismo entre los intereses de un mercado anhelado con oraciones elevadas del panismo, en un estado convertido en territorio apache con la fiereza de sus tribus con bravos renegados y de obediencia con guerreros dóciles.
Aunque los correligionarios indignados, -de uno y del otro lado-, protestan contra los lideres locales por adoptar las medidas impuestas por las cúpulas nacionales, los que han bajado la cerviz ante la codicia y la voracidad que se vislumbra porque ya avistan un contertulio opositor, PAN-PRD y partidos satélites contra el PRI, desde antes del inicio del proceso electoral intermedio 2013, en donde se dirimirán las nuevas posiciones en el Legislativo y en los 10 Ayuntamientos del Estado.
Y es que darán cuenta de esa antinomia arquetípica entre los sentimientos morales del PAN basados en la ideología conservadora y los intereses del populismo y porrismo del PRD. La distancia entre dichos sentimientos, sin embargo, tal vez no sea tal, o probablemente hasta estén estrechamente entrelazados en el proceso electoral intermedio local 2013.
Y es que darán cuenta de esa antinomia arquetípica entre los sentimientos morales del PAN basados en la ideología conservadora y los intereses del populismo y porrismo del PRD. La distancia entre dichos sentimientos, sin embargo, tal vez no sea tal, o probablemente hasta estén estrechamente entrelazados en el proceso electoral intermedio local 2013.
Y harán creer verse es una disposición aliancista que permita la resonancia afectiva del sufragio con un entendimiento recíproco. Pero, –contraproducente-. La empatía recurre a contenidos autorreferenciales imaginándose en la misma situación atípica como en el pasado, así como el amor tiene sus raíces en el reconocimiento del otro, aun en distintas ideologías que no simpatizan consigo mismas, sino en la medida en que los demás simpaticen con ellas. Y eso no lo han logrado. Verbigracia, el fracaso del pasado.
La empatía no es necesariamente benevolencia y el interés por la suerte de los demás, pues articula funciones de semejanza que pueden llevar a la envidia o al deseo de ser y poseer lo que el otro es y tiene. Entraremos en el proceso local 2013 ante un engañoso juego de contrarios aparentes que se juntan y entrelazan sus ideologías otrora vez encontradas.
Hoy en día que el Estado se vende como izquierda combativa, la discusión debe agregarle sobre estos términos electorales que han aterrizado en el debate político sin advertir sus complejidades, mientras atizarán luchas de odios entre ellos mismos, como en el remoto pasado.
Fabrican la idea de un apoyo abrumador con un nebuloso proyecto rebautizado como mega alianza, que en el fondo no es más que el disfraz para un descarado culto a la simulación con amoldamientos circunstanciales y acomodaticios.
Posiblemente nunca como ahora nuestra entidad había estado sujeta a temeridades inconmensurables. No es que en su pasado histórico no hubiese estado sujeta a intrepideces con situaciones mediáticas, ahora que los del PAN y los del PRD se muestran con debilidad al sentirse necesitados de ayuda mutua otra vez, y es que eso creen los hace más fuertes y poderosos para enfrentar al PRI.
Suena entonces difícil de entender como están pensando en ese gran desafío, y no solo por las adversidades domesticas, pero si por los intereses electorales que a nivel local se juegan, sin pensar que pudiera ser que efectivamente fracasen nuevamente.
Suena entonces difícil de entender como están pensando en ese gran desafío, y no solo por las adversidades domesticas, pero si por los intereses electorales que a nivel local se juegan, sin pensar que pudiera ser que efectivamente fracasen nuevamente.
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