La Bola de Cristal
Disuelta el componente opositor
Rogelio RIVERO
A esta hora está desechada la alianza PAN-PRD por la máxima autoridad electoral local, Teqroo, en el proceso electoral que culmina el domingo 7 del mes 7, en una sentencia debido a que, entre otras omisiones, el líder nacional del PAN no concedió el acceso a los tiempos prescritos para realizar la asamblea de la comisión que rige la materia en ese partido.
Y cuenta para eso con el aval de las organizaciones políticas, en ambos polos, sin mayor formación ideológica, que son sumatoria de individualidades que dependen de una cúpula que los rige dirige. Pues de allí emanan las órdenes a cumplir.
Ante el revés propiciado por el Teqroo, el comando jurídico de Acción Nacional acudió ipso facto al TEPJF, quienes, al acusar al tribunal electoral local de propiciar la destrucción del armado opositor entre los partidos Acción Nacional y de la Revolución Democrática, sostienen que eso se les hacía para evitar todo lo que huela a su probable triunfo.
Soldados conmilitones de casacas azules y renegados de la diversidad de tribus de la aldea aurinegra, en pie de guerra danzando alrededor de la fogata con elevadas lenguas de fuego, denunciaron desde el inicio, de manera permanente, sostenida y fundamentada ante el Ieqroo y el Teqroo, en contra de la alianza de marras.
A lo largo del período de inscribir la alianza opositora al PRI ante el Ieqroo, se desestimó y calificó de inconveniente estos señalamientos y porque fueron progresivamente silenciados para sustentar el poder cupular actual que permitiría mantener el control y el reparto de las candidaturas.
Ante el revés propiciado por el Teqroo, el comando jurídico de Acción Nacional acudió ipso facto al TEPJF, quienes, al acusar al tribunal electoral local de propiciar la destrucción del armado opositor entre los partidos Acción Nacional y de la Revolución Democrática, sostienen que eso se les hacía para evitar todo lo que huela a su probable triunfo.
Soldados conmilitones de casacas azules y renegados de la diversidad de tribus de la aldea aurinegra, en pie de guerra danzando alrededor de la fogata con elevadas lenguas de fuego, denunciaron desde el inicio, de manera permanente, sostenida y fundamentada ante el Ieqroo y el Teqroo, en contra de la alianza de marras.
A lo largo del período de inscribir la alianza opositora al PRI ante el Ieqroo, se desestimó y calificó de inconveniente estos señalamientos y porque fueron progresivamente silenciados para sustentar el poder cupular actual que permitiría mantener el control y el reparto de las candidaturas.
Las cúpulas de lado y lado no cuentan con el necesario ideario de esa vieja escuela neoliberal y revolucionaria que llenó la vida política de una buena parte de la reciente década pasada. Y esto no ha sido bien comprendido. Ambos frentes se empeñan en crear concomitantes -compañeros espontáneos-, encuadrados en los partidos PAN- y PRD intentando revivir un pasado que ahora sólo proporciona vicio y vacío.
Y así, ambas banderías incurren en el error de seguir sustituyendo los colectivos propios, en lo que les corresponda cumplir las órdenes de la alta jerarquía, cuya creación no ha tenido cabida alguna entre sus correligionarios de cepa, por lo que se acude al proceso con una imagen irreal y falsa que no fuese susceptible de duda y suspicacia.
Y aun no se tiene asidero en la hipótesis de que con ese bajón que les dio el Teqroo, ahora buscan una específica reacción de reconocimiento del árbitro electoral federal y, con ello, mantener los cuadros a competir en el frente de la lía electoral, con lo que justifica la radicalización y represión indispensable para mantener en pie al armadijo opositor.
El repliegue de las oposiciones de marras pone en claro su acción improvisada. No pueden enfrentar cada quien por su lado a la maquinaria tricolor. Lo que es rechazado por una mayoría a la que no se le ha convencido que la única vía para ganar es por la vía electoral, pero con autenticidad.
Pero esas oposiciones ahora se lanzan al ataque en el TEPJF, en su sala de Xalapa, y al emprender ese camino, están obligadas a fundamentarlo y mantenerlo. Han convertido al árbitro electoral federal en un agente afín a sus reclamos. Y por ello a la hora del ultimátum de la alianza auriazul, se espera que de no encontrar respuesta a favor, el futuro se les volvería azaroso –espinoso-.
Es elemental entonces que el camino opositor no tiene una estrategia que pueda ser democráticamente compartida por el colectivo que lo acompaña. Es algo que sólo conocen y manejan las cúpulas y sus líderes locales. Y eso apunta, en el corto y mediano plazos, a un escenario de agitación, incertidumbre e inestabilidad.
Por otra parte, está el escenario el paso del inexorable tiempo que, en medio del vacío político reinante bajo la tolda opositora, impondría la vuelta atrás para que las oposiciones participen en las elecciones de diputados y alcaldes con el argumento, -que sin el componente, ahora no se les pueden negar los espacios-.
El repliegue de las oposiciones de marras pone en claro su acción improvisada. No pueden enfrentar cada quien por su lado a la maquinaria tricolor. Lo que es rechazado por una mayoría a la que no se le ha convencido que la única vía para ganar es por la vía electoral, pero con autenticidad.
Pero esas oposiciones ahora se lanzan al ataque en el TEPJF, en su sala de Xalapa, y al emprender ese camino, están obligadas a fundamentarlo y mantenerlo. Han convertido al árbitro electoral federal en un agente afín a sus reclamos. Y por ello a la hora del ultimátum de la alianza auriazul, se espera que de no encontrar respuesta a favor, el futuro se les volvería azaroso –espinoso-.
Es elemental entonces que el camino opositor no tiene una estrategia que pueda ser democráticamente compartida por el colectivo que lo acompaña. Es algo que sólo conocen y manejan las cúpulas y sus líderes locales. Y eso apunta, en el corto y mediano plazos, a un escenario de agitación, incertidumbre e inestabilidad.
Por otra parte, está el escenario el paso del inexorable tiempo que, en medio del vacío político reinante bajo la tolda opositora, impondría la vuelta atrás para que las oposiciones participen en las elecciones de diputados y alcaldes con el argumento, -que sin el componente, ahora no se les pueden negar los espacios-.
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