La Bola de Cristal
En una sola bandera
Rogelio RIVERO
En la cámara de diputados local, destacó la voluntad política de los diversos grupos parlamentarios que integran la XIII Legislatura, quienes al aprobar el refinanciamiento de la deuda pública, otorgaron un voto de confianza al Ejecutivo del Estado.
Esta es otra manera de entender y hacer de la política una nueva visión de Estado. Una propuesta para la construcción de un verdadero derrotero de Quintana Roo, dispuestos a no seguir resignados sino decididos a ir hacia mejores horizontes.
Para algunos se hizo intolerable que alguien dijera que en el Legislativo del Estado no está en marcha ninguna unidad legislativa, sino un pacto de opositores dispuestos a construir un movimiento de electoralistas para vencer al partido en el régimen estatal en las urnas puestas en el 2012, dispuestas y controladas por la ambición de los tildes de sus banderías.
Con ese concepto de democracia, se puede pensar libremente pero atendiendo los lineamientos de la suprema Vox Dei, Voz del Pueblo. Pues los supuestos opositores son llevados a la intolerancia por seguir la ideología antagónica de sus partidos, que son víctimas de las políticas opositoras alejadas de las mayorías.
A partir del momento de la definición legislativa en el Congreso del Estado, no hubo oposición, sino -una sola bandera-, con convalidadores y legitimadores del llamado a permitir el proceso de refinanciamiento y bursatilización de la deuda pública del Estado que requería de una cobertura democrática.
Un proyecto destinado a configurar con la soberanía de Quintana Roo una definición democrática en sintonía con el Ejecutivo, que contó con el visto bueno de 22 diputados con su aprobación y 2 en contra por comisión opositora, y otro por omisión al no asistir.
Ya que Mauricio Morales Beiza del PT se arropó con el vestuario de opositor con su voto en contra, secundado por el perredista Alejandro Luna López, yerno de Gregorio Sánchez Martínez. También se registró la ausencia de la diputada del PRI, Leslie Berenice Baeza Soto, quien no pudo asistir a este magno e histórico evento a emitir su voto por cuestiones de salud.
En cada uno de los tres decretos emitidos por la XIII Legislatura se estableció que el Poder Ejecutivo, por medio de la Secretaría de Hacienda, informará a la Legislatura de las operaciones de financiamiento autorizadas en dichos decretos.
De acuerdo con los dictámenes aprobados, la deuda pública total a refinanciarse por parte del Estado es de 10 mil 728 millones de pesos, a través de dos financiamientos, uno hasta por 5 mil 434 millones 458 mil 407 pesos, y el otro hasta por 5 mil 293 millones 532 mil 736 pesos.
Con estos refinanciamientos se espera obtener un ahorro de 8 mil 515 millones de pesos con la reducción de las tasas de interés durante el tiempo que dure el financiamiento, permitiendo que dichos recursos puedan ser invertidos en obra pública productiva. Punto
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