La Bola de Cristal
Los barruntos de un Cabildo
Rogelio RIVERO
Regidores de Benito Juárez no aprobaron la minuta de proyecto de decreto por el que se crearía la alcaldía de Puerto Morelos, adujeron inconsistencias en los propios reglamentos y conformación, luego de una discusión en la que se retractaron varios concejales, se votó en contra. A trote trocado, -mudando de modo de actuar-.
Y es ahí donde se hace confeso el fin -casi a punto del final del trienio-, por aducir, que es totalmente ilegal, trivializando –minimizando la trascendencia-. El cual no era otro que lo que ya se le había convertido en punto de honor con un mecanismo que abriera una vía legal para constitucionalizar la aprobación.
Con el aparataje de un armadijo opositor, en el sino de que fuera aprobada la minuta por ese Cuerpo Edilicio opositor, dejando en claro algo, -que lo único es que no les interesó. Y eso da a que pensar, que en el ayuntamiento de BJ se actúa con disimulo, por ser un Cuerpo Edilicio portador de una ejecutoria política de carácter tribal, -de tribus-, cuyo asidero esencial es la forma de poder a través de la terquedad.
Y así han sido quienes han fracasado en su intento, abonando el terreno político en unas circunstancias que no les favorecieron, como el asalto al relevo del poder municipal de Benito Juárez que se hizo entonces patente por las vías de la presión, el chantaje político y el intervencionismo.
Se han valido de todo tipo de tretas y argucias con procesos camaleónicos apuntalados por una habilidad hacia lo mediático antagónico. El entramado legal lo utilizan discrecionalmente para perseguir y hostigar a sus adversarios, tanto a los reales como a los figurados.
Antes, con tal de que el fin opositor se pueda colmar oponiéndose a todo. Los regidores de BJ no aprobaron la minuta de proyecto de decreto por el que se creó el municipio deBacalar, adujeron inconsistencias en los propios reglamentos y conformación del nuevo municipio,
Basta con ponerse en el lugar de los habitantes portomorelenses en su legítimo reclamo -airado- a los regidores que tienen expuestos sus nombres en el muro de la vergüenza para perpetuarlos en la ignominia, cuyo mayor pecado fue su lentitud en tomar la decisión. Y así llevarán a custas su penitencia.
Cuando lo que está en juego es la libertad de progreso y desarrollo de miles de personas, la mayoría de las cuales son población con quintanarroismo acendrado, cualquier intento por ponerle freno no deja de ser un atentado contra la soberanía, Ello es una realidad censurable e imperdonable.
Y no puede ser la excusa perfecta para convertir los anhelos en coto cerrado donde los concejales de BJ hicieron lo que les vino en gana, máxime por lo que ha provocado el trastorno tibio, por lo que toma forma y parte a todo un movimiento de los portomorelenses que, pese a todo lo que se diga, responde a un masivo despertar del instinto democrático de los habitantes de Puerto Morelos. Punto
E mail: riveroeulalio@hotmail.com
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